Zumba es también conocida como la tierra de la chonta, la guayusa y la hormiga culona.
LA GUAYUSA
Es nativa de la selva de la amazonia ecuatoriana. Es uno de los tres acebos que contienen cafeína; las hojas de la planta de guayusa se secan y se elabora con ellas un té con propiedades estimulantes.
La planta de guayusa es un árbol de crecimiento de 6-30 metros de altura. Las hojas son de hoja perenne y de 2.5-7 cm de largo. Las flores son pequeñas y blancas. El fruto es esférico de color rojo, de 6-7 mm de diámetro. Las hojas contienen cafeína y otros alcaloides. Además de la cafeína contiene teobromina, un estimulante que generalmente se encuentra en el chocolate, y L-teanina, un ácido glutámico análogo que se encuentra en el té verde que ha demostrado reducir la fatiga física y mental, y combatir el estrés.
En nuestro cantón es una tradición acompañar las comidas con una exquisita taza de guayusa, esta a su vez preparada en infusión y endulzada con panela la cual es elaborada por los moradores de la zona.
CHONTA
La conocida y tan preferida chonta (Bactris gasipaes), fruto que se produce abundantemente en la Amazonía ecuatoriana, ha ganado terreno en su aceptación de los hogares zamorano chinchipense. Comprobado su valor nutricional y las ventajas de su consumo, queda entonces rezagado el desinterés que aún gran parte de la ciudadanía tiene por este fruto.
La cosecha de la chonta es bastante tediosa, pues los racimos se encuentran en la parte más alta de la planta, llegando ésta alcanzar hasta los 30 metros de altura.
Utilidades.-
Este particular fruto ha sido uno de los principales recursos expuestos en varias citas gastronómicas y turísticas. De ella se obtiene la chicha de chonta elaborada principalmente por la cultura Shuar, así como varias otras substancias como el alcohol que se ha logrado producir a partir del fruto.
En nuestro cantón es ya una costumbre consumirlas acompañadas de una taza de guayusa.
HORMIGA CULONA
Como una tradición heredada de culturas de nuestros ancestros, constituye un delicioso plato las hormigas culonas, cuyo nombre científico se denominan (AttaLaevigata).
Esta peculiar hormiga aflora para su cosecha una vez al año, especialmente en los meses de octubre, noviembre y diciembre, dependiendo del temporal, el mismo que deberá ser húmedo por sus fuertes lluvias con truenos, relámpagos, seguido de una tarde soleada; tiempo propicio para que tanto hombres, mujeres y niños a salgan a buscarlas en sus hornigueros, con recipientes y vestimenta adecuada para no ser desgarrados por su bravura, característica propia de la hormiga Charapana, que habita en esta zona y que es semejante a la hormiga culona, razón por la cual nos conocen a quienes viven en Chinchipe los conocen como charapanos.
Las hormigas culonas que no han sido cosechadas se disponen a ser devorados en su vuelo por un ave conocida en nuestro medio como wuilos y las que sobreviven se disponen a ser fecundadas en su vuelo nupcial por los machos conocidos como micharos, para luego aterrizar y crear su futuro hormiguero sin antes quitarse las alas, este apareamiento constituye una fiesta para esta especie y que en su día central observamos en la parte Sur de nuestro cantón a la altura del sitio El Rejo, la formación de un manto de hormigas y micharos, conocido como el manto de la novia.
Chinchipe se constituye el único sitio que degusta de este exquisito y afrodisiaco plato tradicional, constituyéndose en un gran alimento por su alto nivel nutritivo y proteínico, bajo en grasas saturadas, según el estudio de la Universidad Industrial de Santander- Colombia, país en donde se exporta la hormiga culonas; ya para su elaboración, son sacadas las alas y patas, para luego ser degustadas ya sean fritas, en caldo, tortillas con yuca e incluso lo preparan como ceviche.
Como Chinchipenses, se identifican con estas dos especies de hormigas (colonas y Charapanas), ya por su bravura, así como por la unión, el trabajo y la lucha constante que hemos demostrado como herencia de nuestros antepasados. Las hormigas culonas constituyen desde tiempos inmemoriales delicioso y nutritivo regalo al paladar. Esta variedad de himenóptero de color amarillo oscuro, cabeza gruesa, tórax delgado, y abdomen extraordinariamente abultado con relación al resto de su cuerpo, provista de grandes tenazas y cuatro alas vistosas.
PREPARACIÓN
Su preparación consiste en quitarles la cabeza, patas y alas, colocándolas a asar en lozas delgadas que permitan su manipulación para evitar que se quemen en el proceso, durante el cual se les rocía con agua sal o a su vez tostadas con mantequilla, actualmente se prepara una variedad de platos como las tortillas de culonas, caldo y ceviche.